Por revistaeyn.com
Ha habido menos acciones de calificación soberana latinoamericana en 2025, pero han seguido inclinándose en una dirección positiva, dice Fitch Ratings en una nueva revisión por pares.
Las economías más grandes de la región continúan enfrentando desafíos fiscales y de crecimiento, con diversos grados de progreso.
"Pero muchas economías más pequeñas, principalmente en Centroamérica y el Caribe, han mantenido posiciones fiscales sólidas y, en algunos casos, un crecimiento sólido", dice el reporte de Fitch.
Recientemente, la agencia mejoró Argentina, Aruba, El Salvador y Guatemala, y rebajó la calificación de Bolivia. El balance de perspectivas positivas a negativas es de seis a uno.
Las tendencias de crecimiento han sido mixtas, pero en general resistentes en medio de la incertidumbre mundial. Fitch proyecta un crecimiento regional de 2.2 % en 2025 y 2.0 % en 2026, aproximadamente en línea con 2.1 % en 2024.
Brasil está experimentando un aterrizaje suave en medio de una política monetaria restrictiva, México se ha desacelerado por el ajuste fiscal y la incertidumbre arancelaria, mientras que Chile, Colombia y Perú se están recuperando de las desaceleraciones. Los riesgos persisten a medida que evolucionan las políticas arancelarias y migratorias de Estados Unidos.
La estabilidad macroeconómica está respaldada por bancos centrales proactivos, tipos de cambio flexibles y/o amplias reservas internacionales, y sistemas bancarios sólidos.
El desempeño fiscal "es mixto" después del deslizamiento en los últimos años. Entre los soberanos con los déficits fiscales más amplios de la región, proyectan mejoras en algunos (México y Panamá) y deterioro en otros debido a presiones de gasto primario (Colombia) o mayores facturas de intereses (Brasil).
"Los ajustes fiscales siguen siendo ajustados en Centroamérica y el Caribe. Los cambios fiscales de Argentina y Ecuador enfrentan vientos en contra sociopolíticos, pero esperamos que eviten un deslizamiento importante", apunta Fitch.
Se avecina un ciclo electoral pesado, ya que Chile votará en noviembre de 2025, y Brasil, Colombia, Costa Rica y Perú lo harán en 2026. Bolivia terminó su segunda vuelta presidencial en octubre y Argentina concluirá pronto sus elecciones legislativas intermedias.
Además, se espera "una amplia continuidad de las políticas en estos casos", excepto en Bolivia, donde "es probable que se produzcan cambios importantes en las políticas".